Ya os he hablado de Heriberto Comillas, el apodado Fuckin' Heriberto. Os he contado sus vistosas anécdotas, que llenan una vida que es cuanto menos fascinante, asombrosa, y en ocasiones, un tanto repugnante.
El hecho de que apenas se haya oído hablar de él es debido al silencio mediático e histórico que varios lobbies han hecho sobre su persona. Heriberto ha conseguido cabrear a mucha gente a lo largo de su vida, y es por culpa de ellos que no hayáis oído hablar de él hasta hoy. Afortunadamente Wikileaks ha sacado una lista de cables que nos cuentan su vida, y han sido tantos que han tenido que hacerle un epígrafe para él solo, justo debajo de los secretos revelados de Estados Unidos, y por encima de los de los Yogures con Bífidus (de los cuales hablaremos otro día, pero como anticipo os diré que los alimentos Bio se perfilan como principales involucrados en la muerte de JFK)
Y es que Heriberto llegó a granjearse un número sorprendente de enemigos. No diremos que tantos como para formar un ejército que se enfrente a él, pero si los suficientes como para organizar una liguilla de futbito. De hecho la liga se formó, a instancia del propio Heriberto y a día de hoy se sigue jugando.

Por ejemplo, Heriberto está fichado como enemigo público en 14 países, 34 estados, y unas 517 comunidades de vecinos. Aclaremos, para no manchar la imagen de este prohombre, que si le perseguían no era por delinquir. No siempre. Solo que su trabajo como periodista, o su espíritu revolucionario el que conseguía colocarle en el lado contrario a los ideales de un país, o de un pelotón de fusilamiento.
Sin ir más lejos los propios Estados Unidos le buscan, por haber destapados oscuros asuntos de la CIA, del FBI o de Oprah. De hecho, la razón de que le hayan dedicado un puesto de honor en Wikileaks es que el mismo ha obtenido el material de dichas asociaciones y se lo ha dado a Wikileaks. Pero no contento con eso, tras haberse ganado a la página de Assange, Heriberto empezó a levantar los oscuros asuntos de Wikileaks, y mandárselos a la CIA. La CIA, confiada tras la resolución de Heriberto como un agente doble, le dieron un puesto en su oficina.
A los dos meses descubrieron que Heriberto había desviado los cables confidenciales a una cuenta de Twitter llamada @CIAcables, y que llevaban publicando todos sus secretos en esta aplicación Web. La CIA aún no ha podido desactivar la cuenta, ya que se ve que Heriberto había instalado el virus en un plugin de Firefox, y se ve que en la CIA no les gusta nada el Chrome.
Como medidas preventivas, eso sí, la CIA ha decidido secuestrar la cuenta de Twitter, y pedirle a la gente que les hagan unfollow.

Otro día os contaré porqué le persigue la Iglesia católica.